La Organización Panamericana de la Salud (OPS) informó que más de 270.000 embarazadas han enfermado de COVID-19 en las Américas y más de 2.600 han muerto por esa causa desde el inicio de la pandemia, por lo cual es necesario que los países prioricen la vacunación en esa población y también en las mujeres lactantes.

«Hablaré con claridad: la OPS recomienda que todas las embarazadas (a partir del primer trimestre), así como a aquellas que están amamantando, se vacunen contra la COVID-19», explicitó este miércoles 8 la directora de la organización, la Dra. Carissa F. Etienne.

«Es seguro administrar vacunas contra la COVID-19 aprobadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) durante el embarazo: son una herramienta fundamental para proteger a las embarazadas durante esta pandemia», resaltó.

La exhortación va en línea con la creciente evidencia de que la gestación es una condición de riesgo por sí misma y de que las vacunas contra COVID-19 son seguras en esa población. Este jueves 8, por ejemplo, un estudio publicado en JAMA mostró que la aplicación de vacunas de ARN mensajero no se asocia con un riesgo aumentado de abortos espontáneos.

«Las vacunas se pueden usar en cualquier trimestre del embarazo y se pueden usar todas las vacunas, no hay una preferencia por trimestre o de una plataforma por sobre otra. La primera que uno pueda tener acceso va a ser la mejor vacuna», señaló a Medscape en español la Dra. Florencia Cahn, infectóloga y presidenta de la Sociedad Argentina de Vacunología y Epidemiología (SAVE).

La directora de la OPS señaló que «si las embarazadas se enferman, tienen un mayor riesgo de desarrollar síntomas graves de COVID-19, y con mayor frecuencia requieren ventilación y cuidados intensivos». También, agregó, tienen una mayor probabilidad de un parto prematuro.

Hasta julio pasado, el Grupo Técnico Asesor de la OPS y el Grupo de Expertos en Asesoramiento Estratégico sobre Inmunización (SAGE) de la OMS solo recomendaban la vacunación en embarazadas con factores de riesgo, como podría ser el contacto con pacientes en trabajadoras de la salud.

«Deshacer 20 años de logros«

En lo que va de año, la mayoría de los países de las Américas ya han notificado más casos y muertes por COVID-19 entre mujeres embarazadas que en todo 2020. Según datos publicados en la actualización epidemiológica de la OPS del 21 de agosto, países como Argentina, Brasil y Chile tuvieron entre enero y julio de 2021 un 50% más de contagios y cuadruplicaron los decesos respecto del año anterior.

En México, en cambio, los casos en embarazadas y puérperas bajaron de 10.530 en 2020 a 8.105 entre enero y julio de 2021. Y también lo hicieron los decesos: de 205 a 161, respectivamente, aunque COVID-19 ya es la principal causa de muerte materna. La Dra. Etienne recordó que México, Argentina y Brasil, en conjunto, «han notificado la mitad de todas las muertes causadas por la COVID-19 en mujeres embarazadas en nuestra región».

«Los países de Latinoamérica y el Caribe llevan tres décadas luchando por reducir la mortalidad materna y ahora la pandemia amenaza con deshacer 20 años de logros. Casi todas las muertes maternas son prevenibles y estas pérdidas son incalculables. (…) Cada muerte materna deja un vacío para sus seres queridos y tiene un efecto dominó en toda la sociedad», señaló.

La funcionaria puntualizó que, por fortuna, «nuestras manos no están atadas» y reclamó que los países mantengan el acceso a los servicios de salud de los que dependen las mujeres embarazadas.

«Los exámenes de rutina y el acceso oportuno a la atención son fundamentales para cuidar la salud de la madre y su bebé y prepararlos para un parto seguro, por lo que deben considerarse esenciales y ser priorizados. Y los países también deben priorizar la vacunación de las mujeres embarazadas y las madres que amamantan», pidió.

Algunos profesionales también intervienen a través de las redes sociales para movilizar con el ejemplo. La Dra. Edith Bracho-Sánchez, pediatra venezolana radicada en Nueva York, Estados Unidos, subió este jueves 9 en la cuenta de Twitter de la American Academy of Pediatrics un video en el que explica que se vacunó contra la COVID-19 «para protegerme a mí misma, a mi familia, a mi comunidad y para proteger a un bebecito que viene en camino».

La Dra. Bracho-Sánchez dijo entender las dudas que pueden tener algunas personas, pero que la ciencia de las vacunas tiene décadas y que, viendo todos los datos sobre la seguridad de la inmunización contra la COVID-19 respecto de la fertilidad y la salud de los niños, «a mí no preocupa». «Como médica, como profesional y como mujer, recomiendo que se vacunen», señaló.