Por Liz Highleyman

Década de 1980: El primer antirretroviral 

El primer informe médico sobre el SIDA se publicó en junio de 1981 y los investigadores descubrieron que el VIH era la causa del SIDA en 1983. Pasarían cuatro años más antes de que la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) aprobara el primer medicamento antirretroviral, el nucleósido transcriptasa inversa. inhibidor Retrovir (AZT, o zidovudina), en 1987.

Década de 1990: cócteles combinados 

La FDA implementó un proceso de aprobación acelerado para medicamentos experimentales en 1992. A principios de la década de 1990, se aprobaron otros tres inhibidores de la transcriptasa inversa de nucleósidos, pero quedó claro que el uso de medicamentos uno a la vez generaba resistencia. La FDA aprobó el primer inhibidor de la proteasa, Invirase (saquinavir), en 1995, y el primer inhibidor de la transcriptasa inversa nucleósido/nucleótido (NNRTI), Viramune (nelfinavir), en 1996, marcando el comienzo de la era de la terapia combinada eficaz.

Década de 2000: Regímenes refinados
primeros medicamentos contra el VIH eran difíciles de tomar, a menudo involucraban múltiples píldoras y efectos secundarios inesperados, lo que estimuló los esfuerzos para desarrollar regímenes más convenientes y mejor tolerados. En 2001, la FDA aprobó Viread (tenofovir disoproxil fumarate o TDF), el primer inhibidor de la transcriptasa inversa de nucleótidos. El primer régimen de una sola tableta, Atripla (efavirenz/TDF/emtricitabine), obtuvo el visto bueno en 2006, lo que permitió a muchas personas tomar una sola píldora una vez al día. Y en 2007, la FDA aprobó el primer inhibidor de la integrasa, Isentress (raltegravir).

Década de 2010: más opciones y el amanecer de la PrEP 

Un creciente cuerpo de evidencia mostró que la terapia antirretroviral efectiva podría no solo detener la progresión de la enfermedad sino también prevenir la transmisión del VIH. En 2012, las pautas federales recomendaron el tratamiento del VIH para todas las personas diagnosticadas con VIH, independientemente de su recuento de CD4. En julio de ese año, la FDA aprobó Truvada (TDF/emtricitabina) para la profilaxis previa a la exposición (PrEP).

Década de 2020: nuevas innovaciones 

En 2020, la FDA aprobó el primer inhibidor de adherencia del VIH, Rukobia (fostemsavir). En 2021, la agencia aprobó el primer régimen completo de tratamiento inyectable de acción prolongada, Cabenuva (cabotegravir y rilpivirina), seguido ese mismo año por las inyecciones Apretude de acción prolongada (cabotegravir solo) para la PrEP. Más recientemente, a fines de 2022, la FDA dio luz verde al primer inhibidor de la cápside del VIH, Sunlenca (lenacapavir), una inyección que se administra una vez cada seis meses a las personas con VIH multirresistente.