Cribados de otras ITS.
Proyecto Once Trece ha incorporado cribados de infecciones de transmisión sexual (ITS) como parte de su estrategia integral de salud sexual, reconociendo que la detección temprana de estas enfermedades es fundamental para prevenir complicaciones y promover el bienestar de la comunidad.
Más allá de las pruebas de VIH, realizamos cribados para otras ITS comunes como la sífilis, hepatitis B y C, clamidia, y gonorrea.
La importancia de estos cribados radica en que muchas ITS pueden ser asintomáticas durante largos períodos de tiempo, lo que significa que una persona puede estar infectada sin saberlo, aumentando el riesgo de transmisión y complicaciones si no se trata a tiempo.
La detección temprana mediante cribados permite iniciar tratamientos oportunos y efectivos, reduciendo la probabilidad de transmisión y evitando que estas infecciones se conviertan en problemas de salud más graves. Además, el proceso de cribado se acompaña de asesoramiento personalizado, educación sobre prácticas sexuales seguras y acceso a métodos de prevención como condones y vacunas, contribuyendo a una comprensión más profunda de la salud sexual y reproductiva.
El enfoque de Proyecto Once Trece es crear espacios seguros y respetuosos donde las personas puedan acceder a los servicios de cribado de ITS de manera confidencial, recibir apoyo y recursos para su bienestar, y tomar decisiones informadas sobre su salud sexual.
Esta labor es esencial para reducir el estigma asociado a las ITS, mejorar la calidad de vida de quienes viven con estas infecciones, y fomentar una cultura de prevención y cuidado continuo en la comunidad.
Proyecto Once Trece no solo se enfoca en la detección temprana de infecciones de transmisión sexual (ITS), sino que también ofrece tratamiento y acompañamiento integral a quienes reciben un diagnóstico positivo en nuestro centro de atención.
Una vez realizada la prueba y confirmada la infección, se brinda atención médica personalizada, asegurando que cada persona reciba el tratamiento adecuado según su condición y necesidades específicas. Esto incluye antibióticos, antivirales y otros medicamentos necesarios para el manejo y tratamiento de ITS como la sífilis, clamidia, gonorrea, y hepatitis B y C, todo bajo la supervisión de profesionales de salud capacitados.
La entrega de tratamiento se realiza de manera rápida y discreta, con la intención de que el proceso sea lo más cómodo y accesible posible para el paciente.
Además de proporcionar los medicamentos, se ofrece orientación sobre el manejo de la infección, consejos para reducir el riesgo de transmisión y educación sobre prácticas sexuales seguras para prevenir futuras infecciones. Este enfoque integral y empático busca no solo tratar la ITS en sí, sino también apoyar a la persona en su bienestar general, garantizando su salud física, mental y emocional.