Compromiso con la población vulnerable.

Proyecto Once Trece está comprometido con el apoyo de las poblaciones vulnerables de Venezuela, incluidas comunidades indígenas, personas privadas de libertad, la población LGBT, y personas que viven en condiciones de pobreza extrema.

Nuestra labor se enfoca en brindar acceso a atención médica, educación en salud, prevención de enfermedades y apoyo psicosocial, garantizando que todos tengan la oportunidad de mejorar su bienestar y ejercer sus derechos fundamentales.

Trabajamos para acercar recursos esenciales, como medicamentos, insumos preventivos y jornadas de atención integral, superando barreras geográficas, económicas y sociales.

Nuestro enfoque está basado en la empatía, el respeto a la diversidad y la dignidad humana, reconociendo las necesidades específicas de cada comunidad y brindando soluciones que promuevan la inclusión, la igualdad y la construcción de un futuro más saludable y justo para todos.

En Venezuela, una parte significativa de la población vive en condiciones de pobreza extrema, lo que implica una lucha diaria por acceder a recursos básicos como alimentos, agua potable, vivienda adecuada y atención médica.

La crisis económica prolongada ha llevado a un aumento de la inflación, el desempleo y la escasez de productos esenciales, lo que ha dejado a millones de personas en situaciones de gran precariedad. Aquellos que viven en pobreza extrema suelen habitar en zonas urbanas marginalizadas, barrios populares o comunidades rurales remotas, donde la infraestructura es deficiente y el acceso a servicios básicos, como electricidad, saneamiento y educación, es limitado o inexistente.

Además, la inseguridad alimentaria ha generado altos índices de malnutrición, especialmente en niños y personas mayores, mientras que la falta de acceso a medicamentos y servicios de salud ha incrementado la incidencia de enfermedades crónicas y prevenibles. Las personas en estas condiciones de vulnerabilidad se enfrentan a barreras significativas para mejorar su calidad de vida, lo que requiere esfuerzos continuos para brindarles apoyo humanitario, atención médica y programas de educación y prevención que les permitan salir del ciclo de pobreza y acceder a sus derechos fundamentales.